Tal y como estaba previsto volvimos a subir a la zona de Broto para hacer algo de barranquismo. Los primeros barrancos del verano.

Nos juntamos 8 personas, de las cuales la mitad eran muy inexpertas o directamente no habían echo nunca dada de barranquismo así que empezamos por algo fácil, el Furco.

Esta es la tercera vez que lo hacíamos, pero seguía siendo un barranco que merece la pena hacer.

Es corto pero tiene una aproximación muy rápida (10 minutos) y es muy bonito, teniendo de todo, rápeles majetes, un tobogán y un salto. Eso si, si hacemos el tobogán no hacemos el salto, y viceversa.

Empezamos el cañón un poco tarde, sobre las 10:30 de la mañana y lo acabamos sobre las 12 del mediodía. Tras acabarlo, comimos y salimos pitando para San Nicolas de Bujaruelo, a hacer el barranco de Lapazosa.

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